Entre lo deseable y lo posible

Afortunadamente ya hace unos cuantos años el paradigma de crianza se viene modificando, buscando poner al niño en el centro, como sujeto de derechos. Entendemos que este viraje es fundamental para generar sociedades más sanas, ya que la niñez es una época clave de la vida, donde nos vamos formando cómo personas.

Sin embargo, existen desigualdades de género en la estructura patriarcal de sociedad en la que vivimos, que siguen perpetuando en muchísimos casos que los cuidados recaigan en mayor medida en las madres, y por ende también la responsabilidad en la crianza.

Entonces nos encontramos en una coyuntura donde se promociona un tipo de crianza respetuosa para el niño pero que no se modifica la estructura patriarcal arcaica, para generar las condiciones que posibiliten la verdadera puesta en marcha de este tipo de crianza.

¿Y qué nos da esta ecuación socio política actual? Que las madres nos veamos una vez más exigidas y presionadas a ser “buenas madres”, “madres respetuosas”, cumpliendo al pie de la letra con las nuevas recomendaciones.

Entonces si no hacés BLW, colecho, lactancia materna exclusiva y prolongada, porteo, movimiento libre, pies descalzos o un sin fín más de prácticas de “crianza respetuosa”, sos mala madre y aparece la culpa nuevamente.

Hacemos lo que podemos con lo que tenemos. La realidad de cada mamá es única, así como su historia y su sentir. Criando desde el amor, buscando mirar a nuestro hijo, integrando lo que vamos queriendo y pudiendo de la información a la que accedemos, y pidiendo ayuda cuando no podemos, estamos haciendo un GRAN trabajo como madres.

Que la crianza sea respetuosa para el niño pero también para la mamá, para la familia. No nos hagamos la trampa de cambiar los viejos mandatos por nuevos. Que la información empodere, de herramientas, ayude a pensar y ampliar la mirada; pero que no se transforme en dogma; no necesitamos más varas altas con que medirnos.

Entre lo deseable y lo posible, por ahí entendemos que es el camino; libre de culpas.

¿Resonás con algo de esto? ¿Cómo la llevás en esta puja entre lo deseable y lo posible? ¿Sos respetuosa contigo misma?

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